No estoy orgulloso de ser asturiano. Hala, ya está, así, a
saco, para empezar el tema (y atraer la atención de los pocos que puedan leer
esto).
Quiero matizar que tampoco me avergüenzo de ser asturiano, es
algo sobre lo que me siento totalmente indiferente, no encuentro nada por lo
que debería sentirme bien por el hecho único y exclusivo de haber nacido en
esta zona del mundo.
¿Por qué debería sentirme orgulloso de ser asturiano? ¿Hay
algo en ello que me haga especial? ¿Si fuese gaditano debería sentirme
orgulloso de ser de Cádiz? ¿Si hubiese nacido en Cádiz habría algo en ello que
me haría especial? ¿Solo por el simple hecho de haber nacido en un área
geográfica determinada? ¿Qué todo el mundo sea especial no es lo mismo qué que
nadie lo sea? Si se piensa con claridad es totalmente ridículo.
Los nacionalismos me parecen algo absurdo, quizás de lo más
absurdo que conozco. Cuidado que hablo de nacionalismos en genérico, o sea,
también hablo de patriotismos, porque tampoco estoy orgulloso de ser español.
El nacer en un determinado sitio “solo” me proporciona una
manera de hablar o idioma que podría aprender cualquier otra persona
independientemente de donde haya nacido.(y en algunos casos ni eso), y unos
recursos y posibilidades determinadas (además estos recursos y posibilidades
solo varían si pasamos de un “mundo” al “otro”, es decir del primer mundo a los
demás). No tengo porque sentirme identificado con otras personas solo porque
hayan nacido en mi misma zona geográfica (artificialmente delimitada, por
cierto).
Es cierto que me gusta mi tierra, y tiene cosas que a mí me
parecen muy bonitas, y tiene también cosas que a mucha más gente de otros
lugares también les parecen muy bonitas, pero eso ocurre en todos los lugares
del mundo. Los casos en los que a la gente no les gusta nada de su tierra de
origen son mínimos. Y yo he estado en bastantes sitios donde he visto cosas tan
bonitas como las de mi tierra, incluso más, y también menos.
Sentir afinidad por otra persona, solo porque sea de mi
misma comunidad autónoma, o país, o continente no deja de ser un sinsentido. Si
nos vamos a lo de las comunidades autónomas, ¿Por qué debería una persona de
Llanes sentir más afinidad por una de Luarca (171 km los separan) que por una
de Unquera (24 km)? ¿Porque los dos primeros son asturianos y el otro cántabro?
¿Debería animar a Fernando Alonso solo porque el carnet de identidad diga que
hemos nacido en el mismo sitio? ¿Debería odiar a Novak Djokovic solo por ser
serbio y tengo que animar a Rafa Nadal? ¿No puedo fijarme que personalidad me
gusta más o es más compatible con mi forma de ser y/o pensar? ¿Es lógico que
mis gustos y ánimos se basen solo en áreas geográficas?
Algo que se asocia a esto son los estereotipos de los
nativos de cualquier sitio, yo tengo que reconocer que la mayoría de los
tacaños que conozco son asturianos, y no catalanes; la mayoría de chulos son
asturianos y no madrileños; y la mayoría de mala gente e hijosdeputa que
conozco son, sí, en efecto, asturianos. Pero solo porque el porcentaje de
asturianos que conozco es muchísimo mayor, pero es muy probable que en el resto
de lugares pase lo mismo. Mala gente y buena gente la hay en todos los lugares,
independientemente de donde diga google maps que está localizado el lugar donde
han nacido.
¿Qué pasa si yo nazco en Andalucía y a los 3 días de nacer
me voy a vivir a Asturias? ¿Seré un vago redomado, del Betis, y hablaré con
acento andaluz? ¿O seré un babayu, del Sporting y que chapurrea bable?
Por eso jamás entenderé los patriotismos, nacionalismo o
localismos, porque si algo tienen es que se pueden ir reduciendo al absurdo
hasta llegar a los “yoismos”. Ejemplo: “Soy europeo, y estoy orgulloso de no
ser americano. Soy español, y estoy orgulloso de no se franchute. Soy
asturiano, y estoy orgulloso de no ser catalufo. Soy gijonés, y estoy orgulloso
de no ser carballón. Soy de La Calzada, y estoy orgulloso de no ser un pijo de
Viesques. Y al final diré que estoy orgulloso de ser yo y estoy orgulloso de no
ser tú”
Para mí, lo verdaderamente importante, no es donde naces, si
no con quién te crías, y vas formando tu personalidad, al final uno no es de un
lugar, si no de una gente, que te influye, te marca y te moldea.
Por eso yo no estoy orgulloso de ser asturiano, y si lo
estoy y mucho de mis amigos (asturianos la mayoría, pero también madrileños,
valencianos, andaluces, americanos, chilenos…) y de mi familia. Y por eso,
cuando vuelvo a Asturias después de un viaje, me siento bien y a gusto, pero no
porque esté en el “paraíso” si no porque estoy cerca de mi gente, que es donde
mejor estoy.
Estoy totalmente seguro que si yo me tuviese que ir a vivir
a San Tirso de Abres (por ejemplo) sin poder ver a mi gente, estaría mal por
muy Asturias y “mi tierra” que sea. Y si toda mi gente viviese en Cádiz, me
sentiría como en casa cerca de “la tacita de plata”.